Fragmentos

La verdadera locura quizá no sea otra cosa que la sabiduría misma que, cansada de descubrir la vergüenza del mundo, ha tomado la inteligente resolución de volverse loca.
(Enrique Heine)

El pasado es un inmenso pedregal que a muchos les gustaría recorrer como si de una autopista se tratara, mientras otros, pacientemente, van de piedra en piedra, y las levantan, porque necesitan saber qué hay debajo de ellas.
(José Saramago. El viaje del elefante.)

Tengo 47 años, ¿y sabes cómo me he matenido vivo tanto tiempo, todos estos años? Miedo... el espectáculo de actos terribles. Si alguien me roba, le corto las manos; si me insulta, le corto la lengua; si se rebela contra mí, clavo su cabeza en una estaca, y la pongo bien alta, para que puedan verla todos. Eso es lo que mantiene vivo el orden de las cosas: el miedo.
(Gans of New York)


"He visto un caracol, se deslizaba por el filo de una navaja, ese es mi sueño, más bien mi pesadilla, arrastrarme, deslizarme por todo el filo de una navaja de afeitar, y sobrevivir."
(Apocalypse Now)



Lo que el corazón quiere, la mente se lo muestra

Esta es una entrevista que La Vanguardia Digital le realizó al Dr. Mario Alonso Puig quien es Médico Especialista en Cirugía General y del Aparato Digestivo, Fellow de la Harvard University Medical School y miembro de la New York Academy of Sciences y de la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia.
.
Hasta ahora lo decían los iluminados, los meditadores y los sabios; ahora también lo dice la ciencia: son nuestros pensamientos los que en gran medida han creado y crean continuamente nuestro mundo. "Hoy sabemos que la confianza en uno mismo, el entusiasmo y la ilusión tienen la capacidad de favorecer las funciones superiores del cerebro. La zona prefrontal del cerebro, el lugar donde tiene lugar el pensamiento más avanzado, donde se inventa nuestro futuro, donde valoramos alternativas y estrategias para solucionar los problemas y tomar decisiones, está tremendamente influida por el sistema límbico, que es nuestro cerebro emocional. Por eso, lo que el corazón quiere sentir, la mente se lo acaba mostrando".
Hay que entrenar esa mente



- Más de 25 años ejerciendo de cirujano. ¿Conclusión?

-Puedo atestiguar que una persona ilusionada, comprometida y que confía en sí misma puede ir mucho más allá de lo que cabría esperar por su trayectoria.

- ¿Psiconeuroinmunobiología?

-Sí, es la ciencia que estudia la conexión que existe entre el pensamiento, la palabra, la mentalidad y la fisiología del ser humano. Una conexión que desafía el paradigma tradicional. El pensamiento y la palabra son una forma de energía vital que tiene la capacidad (y ha sido demostrado de forma sostenible) de interactuar con el organismo y producir cambios físicos muy profundos.

- ¿De qué se trata?

-Se ha demostrado en diversos estudios que un minuto entreteniendo un pensamiento negativo deja el sistema inmunitario en una situación delicada durante seis horas. El distrés, esa sensación de agobio permanente, produce cambios muy sorprendentes en el funcionamiento del cerebro y en la constelación hormonal.

- ¿Qué tipo de cambios?

-Tiene la capacidad de lesionar neuronas de la memoria y del aprendizaje localizadas en el hipocampo. Y afecta a nuestra capacidad intelectual porque deja sin riego sanguíneo aquellas zonas del cerebro más necesarias para tomar decisiones adecuadas.

- ¿Tenemos recursos para combatir al enemigo interior, o eso es cosa de sabios?

-Un valioso recurso contra la preocupación es llevar la atención a la respiración abdominal, que tiene por sí sola la capacidad de producir cambios en el cerebro. Favorece la secreción de hormonas como la serotonina y la endorfina y mejora la sintonía de ritmos cerebrales entre los dos hemisferios.

- ¿Cambiar la mente a través del cuerpo?

-Sí. Hay que sacar el foco de atención de esos pensamientos que nos están alterando, provocando desánimo, ira o preocupación, y que hacen que nuestras decisiones partan desde un punto de vista inadecuado. Es más inteligente, no más razonable, llevar el foco de atención a la respiración, que tiene la capacidad de serenar nuestro estado mental.

- ¿Dice que no hay que ser razonable?

-Siempre encontraremos razones para justificar nuestro mal humor, estrés o tristeza, y esa es una línea determinada de pensamiento. Pero cuando nos basamos en cómo queremos vivir, por ejemplo sin tristeza, aparece otra línea. Son más importantes el qué y el porqué que el cómo. Lo que el corazón quiere sentir, la mente se lo acaba mostrando.

- Exagera.

-Cuando nuestro cerebro da un significado a algo, nosotros lo vivimos como la absoluta realidad, sin ser conscientes de que sólo es una interpretación de la realidad.

- Más recursos...

-La palabra es una forma de energía vital. Se ha podido fotografiar con tomografía de emisión de positrones cómo las personas que decidieron hablarse a sí mismas de una manera más positiva, específicamente personas con transtornos psiquiátricos, consiguieron remodelar físicamente su estructura cerebral, precisamente los circuitos que les generaban estas enfermedades.

- ¿Podemos cambiar nuestro cerebro con buenas palabras?

-Santiago Ramon y Cajal, premio Nobel de Medicina en 1906, dijo una frase tremendamente potente que en su momento pensamos que era metáforica. Ahora sabemos que es literal: "Todo ser humano, si se lo propone, puede ser escultor de su propio cerebro".

-¿Seguro que no exagera?

-No. Según cómo nos hablamos a nosotros mismos moldeamos nuestras emociones, que cambian nuestras percepciones. La transformación del observador (nosotros) altera el proceso observado. No vemos el mundo que es, vemos el mundo que somos.

- ¿Hablamos de filosofía o de ciencia?

-Las palabras por sí solas activan los núcleos amigdalinos. Pueden activar, por ejemplo, los núcleos del miedo que transforman las hormonas y los procesos mentales. Científicos de Harward han demostrado que cuando la persona consigue reducir esa cacofonía interior y entrar en el silencio, las migrañas y el dolor coronario pueden reducirse un 80%.

- ¿Cuál es el efecto de las palabras no dichas?

-Solemos confundir nuestros puntos de vista con la verdad, y eso se transmite: la percepción va más allá de la razón. Según estudios de Albert Merhabian, de la Universidad de California (UCLA), el 93% del impacto de una comunicación va por debajo de la conciencia.

- ¿Por qué nos cuesta tanto cambiar?

-El miedo nos impide salir de la zona de confort, tendemos a la seguridad de lo conocido, y esa actitud nos impide realizarnos. Para crecer hay que salir de esa zona.

- La mayor parte de los actos de nuestra vida se rigen por el inconsciente.

-Reaccionamos según unos automatismos que hemos ido incorporando. Pensamos que la espontaneidad es un valor; pero para que haya espontaneidad primero ha de haber preparación, sino sólo hay automatismos. Cada vez estoy más convencido del poder que tiene el entrenamiento de la mente.

- Deme alguna pista.

-Cambie hábitos de pensamiento y entrene su integridad honrando su propia palabra. Cuando decimos "voy a hacer esto" y no lo hacemos alteramos físicamente nuestro cerebro. El mayor potencial es la conciencia.

- Ver lo que hay y aceptarlo.

-Si nos aceptamos por lo que somos y por lo que no somos, podemos cambiar. Lo que se resiste persiste. La aceptación es el núcleo de la transformación.

La seña de identidad


Más que en lo leído, el lector se revela en los usos caprichosos o instrumentales que hace de los libros. Nada lo delata mejor que los subrayados, las marcas, las citas que entresaca. Tal vez por eso el lector compulsivo que subraya y copia frases para sí mismo en las portadas, guardas y portadillas prefiere que nadie más vea esos rastros. Si se presta el libro, el pudor obliga a borrar las huellas de la lectura para no quedar intelectualmente desnudo delante de terceros. ¿Quién querría alentar especulaciones sobre las causas que llevaron a insistir en esa determinada frase o en ese determinado verso? ¿Cuántos tolerarían mostrar todas las cartas de su erudición? El subrayado y la cita no son solamente estrategias de lectura; son también una variedad mínima, y muy privada, de la autobiografía. De ahí, también, que cuando se compran libros usados puedan inferirse las curiosidades y aun el carácter de los propietarios anteriores simplemente por las marcas que dejaron.

Si se quisiera hacer una paráfrasis de la famosa frase de Osvaldo Lamborghini en su relato "La causa justa", habría que decir que Jorge Luis Borges no leía completo casi ningún libro pero que sus subrayados eran perfectos. Aunque la verdad es que eran subrayados metafóricos; en realidad, antes que trazar una raya más o menos sinuosa debajo de la línea, transcribía, con una letra minúscula que fue mutando de la cursiva a una envarada imprenta, frases, citas, versos en portadas y márgenes que luego, invariablemente, reciclaba en sus propios libros.


Estos dos maravillosos párrafos son la introducción a un artículo que habla sobre el nuevo libro de Laura Rosato y Germán Álvarez: Borges, libros y lecturas; en el cual se recopilan anotaciones y citas de Jorge Luis Borges.

Para leer el resto del artículo:
http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1304904

Si la Humanidad viviese en una aldea...

Siento una especial atracción por este tipo de analogías que reducen de forma gráfica a pequeñas cantidades grandes proporciones, de forma que las asimilamos como si de comer una tarta a cachitos se tratase. No hace mucho os hablé del Calendario Cósmico de Carl Sagan, mediante el cual podemos observar toda la historia de la evolución en tan sólo 12 meses, correspondiéndonos a nosotros, los seres humanos, el último día del año. Ahora os voy a hablar de reducir la humanidad a una aldeíta de tan sólo 100 personas, ¿Dónde crees que estarías tu en ella?


Mark Rosenberg, un geógrafo canadiense, ha hecho un símil tratando de agrupar a toda la población del mundo en un pueblo de 100 habitantes. Los resultados son, cuanto menos, curiosos.


- 61 serían asiáticos: de los cuales 20 serían chinos y 17 de la india. Fijaros...ya obtendrían la mayoría absoluta. ¿Quién sería el alcalde el pueblo?
- 14 serían africanos.
- 11 serían europeos.
- 9 suramericanos.
- 5 norteamericanos .
- 1 de Oceanía.

Pero aquí no queda todo, vamos a lo más interesante... De los 100 habitantes:

- 18 serían analfabetos.
- 33 tendrían teléfono móvil .
- 16 tendrían conexión a Internet.
- 27 menos de 15 años.
- 7 serían mayores de 64 años.
- Sólo habría 18 coches en el pueblo.

...y ahora vamos a lo más espeluznante:

- 63 personas no tendrían acceso a las condiciones sanitarias adecuadas.

- Por religiones, la mayoría serían cristianos (33), 20 serían musulmanes, 13 hindúes, 6 budistas, 2 ateos, 12 se declararían no religiosos y los otros 14 serían de las religiones minoritarias.

- 70 trabajarían, de los cuales 18 estarían en el sector primario, 14 en industria y 28 en servicios; pero sin embargo, 53 tendrían graves problemas para subsistir pues contarían con menos de dos dólares al día.

- 1 vecino de los 100 tendrían el SIDA.
- 26 serían fumadores.
- 14 tendrían problemas de obesidad.

Al final de año, 1 habría muerto y habrían nacido 2.


Qué pocos somos y qué mal nos lo montamos... En un pueblo de cien, 53 vivirían con menos de dos dólares al día, y 63 tendrían problemas de acceso a sanidad, agua y vivienda.

Stephen Wiltshire

Stephen Wiltshire es un chico londinense que padece espectro autista, con todas las limitaciones que esto conlleva; no aprendió a hablar hasta los nueve años, pero sí adquirió un lenguaje particular, una forma de representar su mundo, una forma de vivirlo.
Stephen posee una increíble memoria fotográfica, que lo capacita para reproducir ciudades enteras o paisajes complicadísimos solo con verlos desde el cielo, o desde un punto que le permita una amplia visión. Ya ha dibujado ciudades como Madrid, Roma, Londres y Nueva York, pero aún le quedaba otra de las ciudades más asombrosas del mundo, Tokyo. Por ello, dio una vuelta alrededor de la ciudad nipona de una hora en helicóptero, y se encerró durante una semana para dibujar lo que había visto.
A continuación os dejo el vídeo donde podréis ver su inigualable obra.



...y es que todos somos únicos...

La vida debería ser al revés. Quino

Homenaje a Miguel Delibes

Como no podía ser de otra manera, me veo en la obligación de hacer mi pequeño homenaje a Miguel Delibes, uno de los grandes literatos de nuestro país. Hace ya diez años que publicó su último libro (El hereje), desde entonces se vio aquejado por una brutal enfermedad que lo apartó de su mayor pasión, escribir, y que hoy terminó ganándole la batalla. Comentaba Delibes en una de sus últimas entrevistas, que en su caso el escritor había muerto antes que el hombre, por tanto éste ya no temía morir. Lo expresa de esta forma en el preámbulo de sus Obras Completas: "Aunque viví hasta el año dos mil..., el escritor Miguel Delibes murió en Madrid el 21 de mayo de 1998, en la mesa de operaciones de la clínica La Luz. Esto es, los últimos años literarios no le sirvieron de nada".
Miguel Delibes pasará a engrosar la lista de los clásicos, sin duda alguna, y sus obras permanecerán imborrables en el recuerdo de sus lectores.

Os dejo con él...

-Cinco horas con Mario-

Toda revelación es para vosotros como libro sellado; se le da a leer a quien sabe leer, diciéndole: Lee esto, y responde: No puedo, el libro está sellado. O se da el libro a quien no sabe leer, diciéndole: Lee esto, y responde: No sé leer.

-El camino-

Pero a Daniel, el Mochuelo, le bullían muchas dudas en la cabeza a este respecto. Él creía saber cuanto puede saber un hombre. Leía de corrido, escribía para entenderse y conocía y sabía aplicar las cuatro reglas. Bien mirado, pocas cosas más cabían en un cerebro normalmente desarrollado. No obstante, en la ciudad, los estudios de Bachillerato constaban, según decían, de siete años y, después los estudios superiores, en la Universidad, de otros tantos años, por lo menos. ¿Podría existir algo en el mundo cuyo conocimiento exigiera catorce años de esfuerzo, tres más de los que ahora contaba Daniel? Seguramente, en la ciudad se pierde mucho el tiempo -pensaba el Mochuelo- y, a fin de cuentas, habrá quién, al cabo de catorce años de estudio no acierte a distinguir un rendajo de un jilguero o una boñiga de un cagajón. La vida era así de rara, absurda y caprichosa. "

-Mujer de rojo sobre fondo gris-

En la vida has ido conociendo algunas cosas pero has fallado en lo esencial, es decir, has fracasado. Esa idea te deprime y entonces es cuando buscas apresuradamente un remedio para poder arrastrar con dignidad el futuro. Ahora no tendré a nadie a mano cuando me asalte el miedo. (...)
Ninguno de los dos era sincero pero lo fingíamos y ambos aceptábamos, de antemano, la situación. Pero las más de las veces, callábamos. Nos bastaba con mirarnos y sabernos. Nada nos importaban los silencios. Estábamos juntos y era suficiente. Cuando ella se fue todavía lo vi más claro: aquellas sobremesas sin palabras, aquellas miradas sin proyecto, sin esperar grandes cosas de la vida eran sencillamente la felicidad. Yo buscaba en la cabeza temas de conversación que pudieran interesarla, pero me sucedía lo mismo que ante el lienzo en blanco: no se me ocurría nada. A mayor empeño, mayor ofuscación. Se lo expliqué una mañana que, como de costumbre, caminábamos cogidos de la mano: ¿Qué vamos a decirnos? Me siento feliz así, respondió ella. (...)
Una voz misteriosa me soplaba la lección entonces y yo atribuía a los ángeles, pero ahora advertía que no eran los ángeles sino ella; su fe me fecundaba por que la energía creadora era de alguna manera transmisible ¿De quién me compadecía entonces, de ella o de mí?

-La sombra del ciprés es alargada-

Se iniciaba ya el otoño. Los árboles de la cuidad comenzaban a acusar la ofensiva de la estación. Por las calles había hojas amarillas que el viento, a ratos, levantaba del suelo haciéndolas girar en confusos remolinos. Hicimos el camino en la última carretela descubierta que quedaba en la ciudad. Tengo impresos en m cerebro los menores detalles de aquella mi primera experiencia viajera. Los cascos caballos martilleaban las piedras de la calzada rítmicamente, en tanto las ruedas, rígidas y sin ballestas, hacían saltar y crujir el coche con gran desesperación de mi tío y extraordinario regocijo por mi parte. Ignoro las calles que recorrimos hasta llegar a la placita silente donde habitaba don Mateo. Era una plaza rectangular con una meseta en el centro, a la que se llegaba merced al auxilio de tres escalones de piedra. En la meseta crecían unos árboles gigantescos que Cobijaban bajo sí una fuente de agua cristalina, llena de rumores y ecos extraños. Del otro lado de la plaza, cerraba sus confines una mansión añosa e imponente, donde un extraño relieve, protegido en una hornacina, hablaba de hombres y tiempos remotos; hombres y tiempos idos, pero cuya historia perduraba amarrada a aquellas piedras milenarias.




"Al palpar la cercanía de la muerte, vuelves los ojos a tu interior y no encuentras más que banalidad, porque los vivos, comparados con los muertos, resultamos insoportablemente banales."

Miguel Delibes

Calendario cósmico de Carl Sagan

El fallecido Carl Sagan, astrónomo de la Universidad de Cornell, en su libro "Los Dragones del Edén", incluye lo que él llama: "El Calendario Cósmico", que elaboró para hacer comprender la velocidad relativa con que se sucedieron las diversas etapas desde que se formó el universo, poniendo de relieve el carácter de "recién llegados" que tenemos los humanos en este universo.
A continuación os dejo un genial vídeo en el que explica este curioso e interesante calendario:




Cosmología de Carl Sagan.

1.1. Algunos datos :

Edad del universo, desde el big bang: 15.000 millones de años.
Edad de la tierra: 4.500 millones de años.

1.2. Representación en un año terrestre de los 15.000 millones de años del universo:
Algunas magnitudes:
  • Un segundo representa cerca de 500 años.
  • 24 días representan mil millones de años.

Acontecimientos más significativos en este calendario:


• Primer segundo del 1 de enero: Gran Explosión.
• 1 de mayo: Origen de la Vía Láctea
• 9 de septiembre: Origen del Sistema Solar
• 14 de septiembre: Formación de la Tierra
• 25 de septiembre: Origen de la vida en la Tierra

Los acontecimientos que tienen que ver con la evolución del ser humano tienen lugar el 31 de diciembre:
◦ 3.30: Procónsul y Ramapithecus, posibles ancestros del mono y del hombre.
◦ 22.30: Aparición del primer hombre.
◦ 23.46: El hombre aprende a valerse del fuego.
◦ 23.59: Florece el arte rupestre.
◦ 23.59.52: Invención del alfabeto
◦ 23.59.56: Imperio Romano.
◦ 23.59.59: Renacimiento en Europa.
◦ 24.00: Tiempo actual.

¿No es maravilloso?


A medida que la vida se extendió más allá de los mares hasta la tierra y el aire, millones y millones de formas vivientes evolucionaron. Se cree que habitan en el mundo actualmente más de un millón y medio de especies. De esta enorme cantidad, algunas son tan diminutas como los virus; otras son tan grandes como la ballena; otras como el guepardo han desarrollado una gran velocidad; otras poseen una visión aguda; algunas han seguido existiendo mientras que otras se han extinguido.
Todas las especies poseen numeroso recursos eficaces para sobrevivir en este pequeño y diversificado planeta, pero de los incalculables billones de individuos y el enorme número de especies del pasado y el presente sólo una de las especies desarrolló un cerebro tan complejo como el nuestro, nuestra postura bípeda, nuestro don para el lenguaje, y el estilo de vida humano. Únicamente un animal llegó a ser humano, y es un periodo relativamente corto cuando esto sucedió.

(Washburn e Moore, 1980, pp. 13-15)

Antes y ahora

Antes y ahora son dos posiciones muy alejadas, comprender esa distancia y perdonarla puede consumir una vida, pero ni antes ni ahora tienen la culpa, porque se separaron naturalmente en el tiempo, la culpa es nuestra por no haber entendido lo más brutal, lo más sencillo.
Que antes ya no existe y que ahora es justamente esto.
.
Ray Loriga, en su artículo: Con guantes.

La buena nueva

No nos engañemos, realmente lo que necesitamos para que nuestro mundo sea más justo e igualitario no es contribuír con nuestro granito de arena en ONG o con acciones voluntarias de ayuda a otras personas. No os traguéis la sucia demagogia de que apadrinando un niño contribuiréis a que tenga un plato de comida cada día, o a que pueda acudir a la escuela. Yo os voy a contar una gran verdad: si queréis realmente hacer algo útil por vuestra sociedad, apadrinad a un cura.
.
Claro... La nueva moda es donar 6 euros mensuales para que los curas puedan terminar consecuentemente sus estudios, y así su sabiduría se desplegará por el mundo. Paz y amor. Parece ser que unos cuantos predicadores no tienen el dinero suficiente para realizar sus estudios en el seminario (cuesta 600 euros, menos que la matrícula anual de cualquier universitario...), por lo cual piden a sus fieles que les ayuden donando la pequeña cantidad de 6 euros al mes. Y se quedan tan panchos.
.
Quisiera creer que es una broma, pero parece no ser así. Resulta que aquellos que tienen más cara que vergüenza han sacado esta buena nueva. ¿Cuál será la próxima?
Para acudir a la web de este nuevo negocio, basta con escribir: www.apadrinauncura.com
Atentos a las explicaciones dadas por el pez, digo... "el cristianito". Acabáramos...

¿Qué puede esperarse de un hombre?

«¿Qué puede esperarse de un hombre? Cólmelo usted de todos los bienes de la tierra, sumérjalo en la felicidad hasta el cuello, hasta encima de su cabeza, de forma que a la superficie de su dicha, como en el nivel del agua, suban las burbujas, déle unos ingresos que no tenga más que dormir, ingerir pasteles y mirar por la permanencia de la especie humana; a pesar de todo, este mismo hombre de puro desagradecido, por simple descaro, le jugará a usted en el acto una mala pasada. A lo mejor comprometerá los mismos pasteles y llegará a desear que le sobrevenga el mal más disparatado, la estupidez más antieconómica, sólo para poner a esta situación totalmente razonable su propio elemento fantástico de mal agüero. Justamente, sus ideas fantásticas, su estupidez trivial, es lo que querrá conservar...»

Estas palabras proceden de la pluma de un hombre, que Friedrich Nietzsche consideraba el más grande de los psicólogos de todos los tiempos: Feodor Mijailovich Dostoievski. En realidad, como dice otro de los grandes, Paul Watzlawick: no hay nada más difícil de soportar que una serie de días buenos.

Leer, Miguel de Unamuno

Leer, leer, leer, vivir la vida
que otros soñaron.
Leer, leer, leer el alma olvidada,
las cosas que pasaron.

Se quedan las que quedan,
las ficciones,
las flores de la pluma,
las olas, las humanas creaciones,
el poso de la espuma.

Leer, leer leer: ¿seré lectura
también yo?
¿Seré mi creador, mi creatura,
seré lo que pasó?

(Miguel de Unamuno)

Fragmentos: Paul Auster

Vista desde los confines del espacio exterior, la tierra no es mayor que una mota de polvo. Recuérdalo la próxima vez que escribas la palabra humanidad.

(Paul Auster. Viajes desde el escriptorium.  pag.13)

Alejandro Jodorowsky

Alejandro Jodorowsky, un polifacético chileto, que tanto se atreve a escribir un comic, como a redactar un tratado de lo que el llama "psicomagia", escribir una novela o dirigir películas.
Un hombre que lee el tarot de una forma distinta a la que las famosas pitonisas lo realizan. Él comenta que si alguien le pregunta si encontrará trabajo, él se limita a analizar el presente, cuál es el motivo de que no tenga trabajo, y a partir de ahí, ya vendrá el futuro. Otro tanto de lo mismo cuando preguntan sobre amor, que parece ser la pregunta más concurrida en este tipo de encuentros:
-¿Voy a encontrar a un hombre/mujer?
Jodorowsky vuelve de nuevo al presenta, escrutando cómo es su personalidad, su carácter, su vida diaria...para que desde ahí pueda descubrir el porqué no ha aparecido el amor. No se trata de fijar destinos, sino de comprender presentes.

He de reconocer que todo lo que sé de este hombre es por entrevistas o por artículos leídos acerca de él. Todavía no me he acercado a ninguna de sus obras, y tampoco he visto ninguna de las películas que el ha dirigido. Pero me llama la atención. Quizá sea su voz...esa forma de hablar tranquila, pausada...me cautiva.

Aquí os dejo un pequeño fragmento que no hace mucho escuché de madrugada en la radio. No tiene el mismo efecto escucharlo de su boca que leerlo sobre un fondo negro, pero espero que os guste.

Me gusta desarrollar mi conciencia, para comprender por que estoy vivo, que es mi cuerpo, y que debo hacer para cooperar con los designios del universo. No me gusta la gente que acumula datos inútiles, y se crea conductas inútiles postizas, plagiadas de personalidades importantes. Me gusta respetar a los otros, no, por las desviaciones narcisistas de su personalidad sino por su desarrollo interno. No me gusta la gente cuya mente no sabe descansar en silencio, cuyo corazón critica a los otros sin cesar, cuyo sexo vive insatisfecho, cuyo cuerpo se intoxica, sin saber agradecer estar vivo, cada segundo de vida es un regalo sublime. Me gusta envejecer. Por que el tiempo disuelve lo superfluo y conserva lo esencial. No me gusta la gente que por amarras infantiles a mentiras las convierten en supersticiones. No me gusta que haya un papa, que predica sin compartir su alma con una papisa, no me gusta que la religión este en manos de hombres que desprecian a las mujeres. Me gusta colaborar y no competir. Me gusta descubrir en cada ser esa joya eterna que podríamos llamar dios interior. No me gusta el arte que diviniza el ombligo de quien lo practica, me gusta el arte que sirve para sanar. No me gustan los tontos graves, me gusta todo aquello que provoca la risa. Me gusta enfrentar voluntariamente mi sufrimiento con el objeto de expandir mi conciencia.”
Alejandro Jodorowsky

La cabaña, por Manuel Vicent

Dijo Pascal que todo lo malo que le había ocurrido en la vida se debía a haber salido de su habitación. Se trata de un pensamiento muy certero, porque, bien mirado, todos los problemas que uno arrastra a lo largo de los años se derivan del hecho de haber abandonado aquella cabaña que un día montó en el jardín cuando era niño. El mito de la cabaña sigue teniendo hoy una fuerza extraordinaria. No hay escritor, artista famoso, político, hombre de negocios o banquero sacudido por el estrés que no sueñe con retirarse durante un tiempo a vivir en una cabaña lejos del mundo. Existen cabañas de muchas clases, según el subconsciente de cada uno; las hay de indio apache, de pastor, de leñador del bosque, de pescador escandinavo, de expedicionario perdido en el desierto, de náufrago en una isla de los mares del sur. Otras adoptan la forma de castillo medieval, con almena o sin almena, recias e inexpugnables. En todos los parques públicos y en los jardines de infancia se montan cabañas para que los niños jueguen a esconderse o a protegerse de unos enemigos imaginarios. Algunas son muy lujosas, pero ninguna se parece a aquella tan maravillosa y rudimentaria que construimos, cuando éramos niños, con cuatro palitroques y una empalizada de cañas en el desván, en el patio o entre las ramas de un árbol. La seguridad que nos daba aquella cabaña se perdió junto con nuestra inocencia. Un día dejamos de jugar. A partir de ese momento quedamos desguarecidos, solos en la intemperie, lejos del mundo de los sueños, frente a unos enemigos reales. Es evidente que estamos rodeados de basura por todas partes. A cualquier hora del día nunca deja uno de ser agredido por la sucia realidad, por un acto de barbarie o de fanatismo. Pero existen seres privilegiados, que son capaces todavía de montar a cualquier edad aquella cabaña de la niñez en el interior de su espíritu para hacerse imbatibles dentro de ella frente a la adversidad. Si uno la mantiene limpia es como si estuviera limpio todo el universo; si en su interior suena Bach la música invadirá también todas las esferas celestes. Este reducto está al alcance de cualquiera. Basta imaginar que es aquella cabaña en la que de niños nos sentíamos tan fuertes.
Manuel Vicent

Una nube sobre Bhopal

A continuación os dejo un impresionante documental acerca de la tragedia acaecida sobre la humilde ciudad de Bhopal. Si tenéis 56 minutos libres y os decidís a verlo tomad asiento y prepararos para ver la crueldad y la injusticia acaecida a un pueblo, el que todavía hoy arrastra las consecuencias de aquel desastre medioambiental.

Todo comenzó a las doce y cinco de la noche del 2 al 3 de diciembre de 1984...


1:





2:







3: