Fragmentos

La verdadera locura quizá no sea otra cosa que la sabiduría misma que, cansada de descubrir la vergüenza del mundo, ha tomado la inteligente resolución de volverse loca.
(Enrique Heine)

El pasado es un inmenso pedregal que a muchos les gustaría recorrer como si de una autopista se tratara, mientras otros, pacientemente, van de piedra en piedra, y las levantan, porque necesitan saber qué hay debajo de ellas.
(José Saramago. El viaje del elefante.)

Tengo 47 años, ¿y sabes cómo me he matenido vivo tanto tiempo, todos estos años? Miedo... el espectáculo de actos terribles. Si alguien me roba, le corto las manos; si me insulta, le corto la lengua; si se rebela contra mí, clavo su cabeza en una estaca, y la pongo bien alta, para que puedan verla todos. Eso es lo que mantiene vivo el orden de las cosas: el miedo.
(Gans of New York)


"He visto un caracol, se deslizaba por el filo de una navaja, ese es mi sueño, más bien mi pesadilla, arrastrarme, deslizarme por todo el filo de una navaja de afeitar, y sobrevivir."
(Apocalypse Now)



Eutanasia.

" La calidad de la vida consiste en una conformidad placentera, una percepción armónica del cuerpo y de la mente con el todo al que están condicionados y sujetos los sentimientos personales. Cuando no se sobrevive por simple temor a la muerte, la muerte es la única alternativa racional para liberar a la vida del sufrimiento. Cuando no hay calidad de vida, cuando el caos es total no hay más alternativa que la desintegración de la materia para renacer."

(Ramón Sampedro)

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En el prólogo del libro "Cartas desde el infierno", Ramón Sampedro comienza diciendo...

"El día 23 de agosto de 1968 me fracturé el cuello el zambullirme en una playa y tocar con la cabeza en la arena del fondo. Desde esa día soy una cabeza viva en un cuerpo muerto. Se podría decir que soy el espíritu parlante de un muerto."


Mantiene en prolongado suspiro al lector desde esa primera página hasta el último párrafo del libro...

"Os quise lo mejor que supe y pude. Todos me quisistetis del mismo modo. Sólo puedo pagaros con la mayor muestra de gratitud: muriéndome. Y vosotros respetando mi voluntad."

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Ramón Sampedro abrió nuevamente el debate sobre un tema tan polémico: eutanasia. Desde entonces han surgido numerosos casos que han puesto en la palestra la eterna pregunta sobre la ética y moralidad que una muerte voluntaria conlleva.


Resulta paradógico que una persona sea dueña de su vida hasta el momento en el que desea morir; es ahí cuando la justicia arrebata abiertamente, sin tapujos, toda libertad individual, condenando a la persona postrada a una muerte en vida. De ésta manera se ve arrastrada a urdir un elaborado plan para morir clandestinamente.
Sampedro llevó a cabo el siguiente:
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"Repartió 11 llaves entre sus amigos. Y a cada cual le encomendó una tarea: uno compró el cianuro; otro lo analizó; el siguiente calculó la proporción de la mezcla; una cuarta persona lo traslado de lugar; el quinto lo recogió; el sexto preparó el brebaje; el séptimo lo introdujo en un vaso; el octavo colocó la pajita para que Ramón, imposibilitado del cuello para abajo, pudiera beberlo; el noveno lo puso a su alcance. Una décima mano amiga recogió la carta de despedida que garabateó con la boca. Y otra, tal vez la más importante, se encargó del último deseo de aquel hombre que quería morir: grabar en vídeo el acto íntimo de su muerte."



Os dejo un poema estremecedor de él:

¿Y cómo hablo de amor si estoy muerto?

Si los muertos no tenemos pasiones,


ni de humanos afectos sentimientos

sólo somos de los vivos el espanto.
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Todo es incoherencia y contradición

para un muerto entre los mortales.

No lo excitan la luna, ni la flor, ni la hembra,

porque no tiene carne para reproducirse.
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¿Hay cosa más absurda que escuchar a un cadáver

hablar apasionadamente como un humano,

si no puede sentir ni el calor ni el frío

ni el placer ni el dolor o el llanto?
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Es horrible ser un muerto entre los humanos.

Ser el muñeco con quien representan una parodia

absurda

los psicópatas esquizofrénicos vivos

que disfrutan con la visión de un cadáver

putrefacto.
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Embadurnado de excrementos, babas y locura

al que con asco y saña, impertinente, siguen

limpiando.

Y pide liberarse, el cadáver, de entre los vivos locos,

pero éstos no entienden los silenciosos gritos de

los muertos.
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Y con patético ensañamiento le siguen animando:

cuenta, muerto, tu historia de lo que estás pasando;

parece que eres uno entre nosotros, los vivos,

aún aparentas algo de ser humano.
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En vano les digo, ¡que no!, ¡que estoy muerto!,

que ya no puedo hablar igual que ellos

porque me resulta absurdo hablar igual que los

humanos.

Y no me dejan ser ni muerto ni vivo

estos locos y alucinados desquiciados.

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Hay quien se olvida de que con la eutanasia se está cumpliendo el deseo de una persona, no de un cuerpo. Cuando la vida de dicha persona se convierte en un sufrimiento y dolor permanente nadie es quien para negarle acabar con su vida.



Los grandes defensores del lema "No a la eutanasia" enseguida abogan al derecho irrevocable que todo ser humano posee: el derecho a la vida.
Considero que defender el derecho a la vida y el derecho a la eutanasia no son términos contradictorios.

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La Iglesia Católica Romana, la Luterana y la Episcopal han emitido declaraciones formales opuestas a la eutanasia y al suicidio asistido.

- Estados Unidos: Los ciudadanos en el estado de Oregon aprobaron la medida el 16 de noviembre de 1994 que legalizaba la eutanasia bajo condiciones limitadas.

- Holanda: La eutanasia en este país ha sido aprobada por el Parlamento en el 2002.

- Japón: El 28 de marzo de 1.995 la corte del Distrito en Yakahoma encontró culpable a un doctor de asesinar un paciente de cáncer terminal que esperaba morir en unos pocos días. Recibió una condena de dos años de prisión, que se suspendió. La corte entonces enunció cuatro condiciones bajo las que se permitiría la eutanasia en Japón:

  • - El paciente sufre un dolor físico inaguantable.
  • - La muerte es inevitable e inminente
  • - Se han tomado todas las medidas posibles para eliminar el dolor
  • - El paciente ha expresado claramente su consentimiento.



***

"...el derecho de nacer parte de una verdad: el deseo de placer. El derecho de morir parte de otra verdad: el deseo de no sufrir. La razón ética pone el bien o el mal en cada uno de los actos. Un hijo concebido contra la voluntad de la mujer es un crimen. Una muerte contra la voluntad de la persona también. Pero un hijo deseado y concebido por amor es, obviamente, un bien. Una muerte deseada para liberarse de un dolor irremediable, también. Ninguna libertad puede estar construida sobre una tiranía. Ninguna justicia, sobre injusticia o dolor. Ningún bien positivo, sobre un sufrimiento injusto..."

(Ramón Sampedro)


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6 comentarios:

EnLaOscuridadDeLaNoche dijo...

Es un tema muy delicado... pero en mi opinión cada uno debería ser dueño de su vida y de su muerte (hasta el punto en que la Dama de la Guadaña nos deja).
Supongo que lo difícil es intentar generalizar todos los casos, y legislarlo... porque lo cierto es que nos guste o no se debe legislar, para evitar que pueda usarse de excusa...

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Si, cierto es que se debe legislar enlaoscuridaddelanoche. Muchos sectores de la sociedad se oponen tajantemente a llevar a cabo esta medida, como si con ella se permitiera el suicidio ante cualquier sufrimiento, nada mas lejos de la realidad. En determinados casos terminar con la vida de una persona es liberarla de una muerte en vida y de un sufrimiento permanente.

¿Gracias por dejarte opinar Tirion? No...gracias a ti por hacerlo. Aunque tuvieras una idea totalmente contraria a la mía estaría encantadísima de leer tu punto de vista.


Un beso a ambos. :D

Hibris

Azhaag dijo...

Basta con ponerse en el papel, incapacitado para todo, postrado en una cama las 24 horas del dia los 365 dias del año. Vivir no se limita solo a respirar, y si la persona asi lo encuentra acertado la muerte puede llegar a ser una liberacion.

Precioso el poema que has puesto.

Un beso.

Azhaag

Azhaag dijo...

La muerte nos da miedo a aquellos que vivimos, no a los que ya se consideran muertos.

Azhaag

Anónimo dijo...

¡¡¡SI!!!

besazo!

Anónimo dijo...

Muy acertado lo que has escrito Azhaag, totalmente de acuerdo.

Wilde, mas claro imposible...jajaja

Un beso a los dos. :)

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